Hoy día, somos mas conscientes de que una buena nutrición es vital para tener una vida saludable. Conservar nuestro cuerpo, templo en el que vivimos, durante mas años, tiene una relación directa con los alimentos que ingerimos.
Empieza a haber un movimiento importante en nuestra sociedad que diferencia la alimentación de la nutrición. Se ha logrado que en los países desarrollados casi todas las personas se alimenten todos los días varias veces, eso sí, la calidad de esos alimentos y lo realmente nos aportan, a parte de buen sabor e imagen atractiva, es una incógnita.
Que los productos que consumimos sean aptos para el consumo humano no quiere decir que sean beneficiosos. Olivier De Schutter, relator especial de Naciones Unidas sobre el derecho a la alimentación, cree que el concepto “comida basura” es riguroso como definición.
¿Dónde quiero llegar con esto?, en nuestra sociedad quien más y quien menos dispone de una cuenta corriente en una entidad, un préstamo, una tarjeta para extraer dinero y probablemente tenga uno o más productos que está utilizando para alimentar su retiro, jubilación y lograr acumular dinero.
Al igual que en la alimentación, llegó primero la comida “para todos”, aun de mala calidad se consumía pues se saciaba el apetito, pasado el tiempo, cuando comer todos los días ya no era una preocupación, se empezó a ser consciente de que el consumo de esa comida deterioraba nuestra salud, nos convertía en enfermos crónicos y dependientes de fármacos que paliaban los síntomas de aquellas patologías que íbamos provocando con nuestros propios hábitos.
Debemos entender que la industria financiera tiene alimentos para todos de forma masiva pero debemos ser conscientes de que si queremos nutrirnos hay que adquirir un mínimo de conocimientos financieros y consumir los que sean saludables para nosotros, que nos mantengan sanos y cada día más tranquilos, siendo conscientes de que lo estamos haciendo bien. Con Educación Financiera evitaremos malos hábitos, lograremos evitar un empacho de deudas, intoxicaciones masivas a ancianos con preferentes, campañas del alimento financiero del mes.
Probablemente no tengamos la certeza de la composición exacta de una hamburguesa de las que podemos comernos en una de las famosas cadenas de comida rápida que todos conocemos, pero sabemos perfectamente que lejos de beneficiarnos nos perjudica la salud.
El sistema y sus intereses nos llevan a consumir sin pensar y nosotros como individuos debemos de pensar antes de consumir.
Según los expertos, cada año que pasa se aumenta la esperanza de vida, es una gran noticia, pero vivir dependientes de medicamentos le quita bastante atractivo y por supuesto, vivir más, pero con menos dinero se lo quita absolutamente todo.
Ser consciente nos hace entender que nuestros intereses nada tienen que ver con los del sistema, desde la industria alimenticia, la farmacéutica, la financiera y como no la de los medios de comunicación, cada una de esas industrias es necesaria, pero pregúntate que harías y como cambiarían tus hábitos si tuvieses esta conciencia.
Está demostrado que las personas que tienen ingresos más altos consumen alimentos de mejor calidad, más saludables, cuidan más su cuerpo con actividades deportivas, yoga, pilates, logrando mantenerse sanos más años y además también suelen estar mejor asesorados financieramente hablando.
La conclusión es que mejorar nuestra situación financiera dentro de este sistema en el que vivimos, nos ayuda a ser cada día un poquito más independiente de él.
Te invito a una Conferencia de Planificación Financiera puedes ahorrar más y mejor, sacarle partido a tus ahorros. La cultura y el conocimiento pueden parecer caros, pero la incultura y la falta de conocimiento lo son aún más.